Antonio mata a Crítica de la Argentina

Los compañeros del diario Crítica de la Argentina, como todos saben, atraviesan una difícil situación. Mis evidentes diferencias con la línea del matutino, por supuesto, no tienen ninguna cabida en la actual instancia puesto que se trata de un estadío diferente. Anterior.

Cuando uno elige gustos en una heladería, puede preferir frutilla o chocolate pero, si estuviera muriendo de inanición, esa elección no tendría lugar. Acá, en Crítica, en el periodismo actual, en Argentina, lo que se juega es el trabajo de unos 200 compañeros. Y eso es sagrado.

Pero, además, los compañeros que luchan -y los que no- lo hacen no sólo por todos los demás trabajadores de prensa, también lo hacen por todo el grueso de los trabajadores. Incluídos, por supuesto, aquellos que seguimos sufriendo los atropellos del capital, la injusticia de las inequidades, la irresponsabilidad y el egoísmo de la clase empresaria, la impericia deliberada de ciertos sindicatos, la prepotencia de la impunidad y los serios perjuicios de la participación desigual de los trabajadores en instancias de decisión.

Al diario sojero lo presentó en sociedad Jorge Lanata, acostumbrado a alquilar su imagen para operar la instalación de productos que pronto abandona, usufructuó los beneficios de la pelea entre el Gobierno y los pules agroexportadores. y luego fue cedido (cedido su rol social, económico y democrático; cedida su intervención cultural, su responsabilidad comunitaria, su virtud productiva, su compromiso ético) al prontuariado empresario español Antonio Mata.

Mata, además de las causas que se le siguen en España por otras estafas, es conocido por todos nosotros, por haber sido la cara visible del grupo económico que adquirió Aerolíneas Argentinas a precio de bicoca, vaciándola inmediantamente después.

Si esto lo sabemos nosotros, más bien que también lo sabía Lanata. Sin embargo, y a pesar de haber convocado a la mayoría de la gente que allí trabaja, el gordo decidió entregarlo(s) a semejantes manos. Intentó mantener su pose canchera con un chiste de mal gusto diciendo que primero había ido a buscar a la madre Teresa de Calcuta pero no tuvo suerte... En síntesis, se excusó diciendo algo así como que debió venderlo a un facineroso porque es (son) el único que puso la plata.

Pero, como la manta de la moral tiene el tamaño de la verdad y no el del chamuyo, las patas de la perfidia del gordo quedaron al aire cuando disparó cobardemente a los cimientos de la lucha de sus ex compañeros, al banalizar públicamente los motivos (por ejemplo, que hay gente a la que aun se le debe marzo o el riesgo mismo de sus puestos de trabajo), reduciéndolos a un capricho por 300 pesos. No hacía falta, pero la confirmación de que Lanata operaba llegó hoy con la incomparescencia de la empresa a la mediación en el Ministerio de Trabajo y el posterior llamado a convocatoria.

Los trabajadores, entonces, asumieron la contracara, encarnaron la dignidad y, además de bancarse el paro, esta noche han decidido defender sus puestos de trabajo tomando el diario. Tamaña picardía sería que el resto de los trabajadores los dejáramos solos en este momento. Por mi parte, dedico mis felicitaciones, hago público mi agradecimiento, mi súplica porque no aflojen y mis mejores deseos. sepan que espero su victoria más que la de la Selección Argentina en el mundial.

A continuación la carta de los trabajadores:

"Ante las gravísimas decisiones de la asamblea de accionistas de la empresa editora del diario Crítica de la Argentina y la no concurrencia de ésta a la audiencia en el Ministerio de Trabajo, los trabajadores del matutino realizaron una masiva asamblea en la cual decidieron por unanimidad la permanencia en sus lugares de trabajo durante las 24 horas en defensa de sus puestos laborales.

Esta medida continuará hasta tanto la empresa brinde garantías de la continuidad de Crítica de la Argentina y pague los salarios adeudados a los casi 200 trabajadores.

Hoy, miércoles 12, representantes de los dos accionistas de Papel 2.0 -el español Antonio Mata (78%) y Marcelo Figueiras (22%)- se reunieron en asamblea y definieron pedir el concurso preventivo de acreedores y el procedimiento de empresa en crisis ante el Ministerio de Trabajo. Como si esto fuera poco, la empresa consignó en un comunicado que "los accionistas no continuarán financiando las actividades de la sociedad".

De esta manera los trabajadores no sólo no tenemos certeza alguna sobre el cobro de nuestros salarios impagos, sino que tampoco sabemos si habrá continuidad de nuestra fuente laboral.

Ante este panorama y el retiro de parte del mobiliario de la redacción, los trabajadores presentaron ante la Justicia una medida cautelar a los fines de trabar una inhibición de bienes y activos de la empresa para evitar el vaciamiento y garantizar el pago de nuestros salarios. La empresa tampoco dio la cara, por segunda vez en 24 horas, para comunicar sus decisiones en la audiencia que convocó el Ministerio de Trabajo y que hoy fue presidida por la viceministra de Trabajo, Noemí Rial, quien citó a un nuevo encuentro para el viernes 14 a las 12 del mediodía en la sede de Alem 650.

La asamblea de trabajadores también resolvió continuar con la campaña de difusión "Salvemos al diario Crítica" y mañana jueves realizará movilizaciones y cortes de calle. El viernes 14 a las 12 horas convocamos a todos los trabajadores de prensa, agrupaciones sociales, sindicales, políticas y estudiantiles a un gran acto de apoyo en la puerta del Ministerio de Trabajo, sede Alem 650, donde esperaremos los resultados de una nueva audiencia."