09 junio 2008

Tiempo muerto

Ahora, Cecilia Pando, los milicos presos, Carlo, De la Rú, que dijo "tenía una espontaneidad"... claro, porque a de la Rúa le empezás el cuento hoy y se lo terminás en seis meses y se mentiene en vilo, pero yo pregunto ¿A qué mierda fué Aníbal? al velorio de Bernardo, que era rumano, Neustadt.

Neustadt se fue el día del periodista porque Dios es un jodón, ¿no?

¿Mariano lloraba porque vio algo? Yo vi en la película Ghost que los muertos pueden ver cómo el ejército negro se lleva a los otros muertos. María Julia "no estaba presa ni mierda" Alsogaray, también lloró.

El Carlo no se sabe si fue a despedirlo o le pasó una serie de sobres para que le vaya preparando la campaña allá abajo.

Dicen que De la Rúa estaba buscando a Doña Rosa para darle el pésame.

Dicen que doña rosa brindó con sidra y nunca fue a la plaza garca.

Varias fuentes coinciden en que el enterrador del jardín del coqueto cementerio Parque Memorial de Pilar, fue el más atinado al cerrar la ceremonia, cuando preguntó ¿Lo dejamos ahí?.

Juan Carlos Blumberg siempre va a dónde el deber y la Patria llama. Se calza la carpeta y va.

Che, si ante la tumba de Bob Marley se le hace honor al muerto fumándose un porro, delante de la tumba de Bernardo ¿hay que mostar un huevo, escupir un pobre o apoyar un golpe?

Los que tararearon Fuga y misterio ¿velaban a Bernardo o al tema de Piazzolla? Eso es como que mañana se muera Tinelli y en el velorio todos canten Twist and shout. Piazzolla se retuerce como un bandeoneón en la tumba.

Me causa gracia Lanata, simulando atacar al viejo dinosaurio para defenderlo casi como un soñador, de la elite a la que él aspira. Lamentable, el gordo es más peligroso que los agroquímicos de Monsanto.

Las empresas que siempre acompañaron a Bernardo lo podrían seguir acompañando, ¿no?

Bernardo se murió a los 83 (en la quiniela, las plantas, o la felicidad, me quedo con este último), se murió almorzando en su casa. Quizás pergeñaba su próximo Apuntes... para Ambito y, se sabe, donde se come...

La rotonda se quedó sin ratón, el segundo sepelio fue verdad, la tele del averno hoy proyecta Tiempo muerto.

4 comentarios:

Aguilucho dijo...

Ayer dieron el Metro (creo) un programa con la última nota que le hicieron a Neustadt. No la vi completa, en un momento me cansó, pero tuvo un pasaje en el que habló bastante de su infancia. No quiero que se me malinterprete, todo lo que le pasó a ese sorete no justifica que haya sido un hijo de puta muy peligroso. Pero resultó interesante ver cómo la infacia dura forjó al tipo que terminó siendo después.
Por otra parte, repitió aquello de que quiere en su epitafio una plaquita que diga "ayudó a pensar".
Habría que ir al cementerio y agregar "un país sólo para ricos".

Peralta dijo...

Ulises, deje de destilar veneno. Ya está, se murió. Está bien, acepto la frustración de que no lo matamos, pero tampoco le mee la lápida, viejo. Hay cosas más importantes. No la escuchó a Cristina ayer? Déjese de joder con el dinosaurio extinguido.

Ulises Dumond dijo...

Tres cosas.
Una, lamento haber vuelto a hablar de Bernardo, de haber leído su comentario antes, Peralta, no me exponía a otra puteada.
Dos, me divierte Cristina, pero aún no me conmueve. Cuando vea a la oligarquía de espaldas como Charly García voy a volver a sobarle esas patas como una dama se merece.
Tres, a propósito de "la frustración de que no lo matamos" nosotros..., no se olviden de Fernando Peña.

Arqueros Sin Manos dijo...

No le crea a Neustadt lo que cuenta de su infancia dura. El tipo es un mentiroso. El tipo que terminó siendo después es el que forjó su infancia dura. No le de argumentos.
Hay que mear la lápida de Neustadt. No le digo hacer fuerza para mear si no tiene ganas, pero si le dan ganas de mear, ya que está, va y mea la lápida de Neustadt.