28 septiembre 2010

Elige tu propia aventura


Mientras que otro juez-sicario se carga a la Justicia con fundamentos de peores cimientos que las nuevas construcciones de la Ciudad de Buenos Aires, y detiene la ejecución de una Ley en favor de la democracia, votada por el Congreso, de insidencia nacional y, nada menos, que el objeto de años de trabajo de miles de personas en todo el país, una norma que busca combatir la inequidad extrema en el seno de la comunidad; el título principal de Clarín de hoy es un argumento de una talentosa contundencia en favor de la Ley.  

Ya bastante poco ético suena el hecho de que un medio de comunicación utilice la misma plataforma con la que elabora su producto, reglamentos y contratos de lectura incluidos, indistintamente también para 'hacer política', como dicen ellos, en favor de sus intereses y no del de los lectores; como para que encima de ello, de menearse obcenamente como víctima y nunca como el principal interesado, además de usar su sitio principal, contractualmente comprometido a la información más importante, sumándole que acusa a la Presidenta de que "ataca" a la "Justicia", con mayúscula, y no que ataca a un funcionario, y no que opina sobre un fallo judicial, o que se manifiesta o dialoga, para que, además, la pretenda de su mismo tilingaje,  amonestando su actividad jocosamente, como quien sabe bien qué hacer en sus tiempos libres en Nueva York.

Así, sus lectores tuvieron que creer que Hugo Chávez había sido derrotado en las elecciones venezolanas.  



La Nación hace lo propio. "Tensión", "demoran el escrutinio" ¿quiénes sino, los que están en el poder? Víctor Hugo muestra algo de esto y de cómo se reproduce en toda la región, igual que lo hace La Nación, barato y vergonzoso, pero terriblemente efectivo para explicar por qué no podemos evitar que Chávez sea imagen y semejanza del bananero, el pibe de jogging y gorrita el prototipo del chorro, el político sinónimo de corrupto como el empresario de exitoso, el pobre vago, borracho, peligroso, negro, y los mensajeros todos motochorros.
Todos chorros, menos ellos que se robaron papel prensa, por ejemplo.
Todos corruptos, menos ellos que sólo le robaron la plata a los jubilados.
En fin.




2 comentarios:

pablo dijo...

pero ahora Victor Hugo es de los buenos? porque hace exactamente 23 meses vos lo ponías del lado de los malos, acá...

curioso, porque a mí me parece que el tipo hace 20 años que viene sosteniendo las mismas ideas, pero para vos puede pasar de malo a bueno en 2 años...

para pensar (?)

Ulises Dumond dijo...

Me acuerdo del chiste del borracho que pregunta "cuál es la vereda de enfrente" y, cuando le dicen, se queja: "Pero si recién estaba allá y me mandaron para acá".

La coherencia, amigo Pablo, no equivale a decir siempre lo mismo, como estima alguna gente. Si a cada hora le preguntaran, durante un día entero, 24 veces, si afuera es de noche; debería decidir entre ser honesto o ser coherente.

Critiqué y celebré a Víctor Hugo, alternativamente, desde inmemoriales tiempos a.K (antes d K). Yo iba al gallinero religiosamente cuando él estaba ensañado contra River y tenía ganas de cagarlo a palos, y lo ví correr la maratón y sentí pena.
Escuchaba su equipo bilardista y pensaba en un atentado a la radio, pero no hay una vez que escuche su relato del gol del Diego que no me emocione. Hay colegas que me hablan bien de él y colegas que me hablan muy mal. Me pareció un hijo de puta cuando se la agarró con Apo al aire y un grande, cuando presentó el libro de Majul.

Si es verdad lo q ud dice y hace 20 años q VH viene sosteniendo las mismas ideas, me gusta más cuando esas ideas defienden causas justas o populares (enfrentando a Don Julio o a Clarín) q cuando lo obligan a ponerse camisetas como la del Grupo Prisa.

No sé, lo que quiero decir es que el 28 de octubre de 2008, en Almorzando con La Gorilá, atacaba a Gak sin argumentos (sólo lo acusaba de mentir) y en octubre del 2010, es difícil imaginarse que lo inviten a esa mesa.

De hecho, la nota q ud refiere, dice: "Como enhorabuena se trataba de una mesa de alta calidad opositora, lo que no es normal, (Mirtha) se pudo arriesgar a llevar a alguien que sin intereses contrarios es uno de los verdaderos intelectuales del oficialismo" (Gak).

Y, sí, la gente cambia, necesariamente, evoluciona, retrocede, entiende, se confunde... porque la gente está viva y así es la vida y todo lo humano.

Un saludo.